Hacia el norte se levanta el majestuoso macizo rocoso de Montserrat, un lugar sin duda lleno de magia y portales. La brisa es fresca y el sol brilla alto en un cielo despejado. Hay efervescencia en el ambiente y poco a poco van llegando los soñadores al lugar del encuentro. Veo algunas caras conocidas que recuerdo con inmensa alegría y cariño, pero la gran mayoría son nuevos integrantes que se unen a esta gran familia. Los soñadores llegan de varios rincones del planeta, unos más cerca, otros más lejos. La diversidad se hace patente, pero algo los une: vienen con ganas de aprender, de volar, de vivir una gran experiencia y compartir junto a almas afines.
Un lugar sin duda lleno de magia y portales.
El lugar se va llenando e iluminando, se reparten abrazos, risas y sonrisas. Cada uno de los soñadores recibe un lugar en una de las Naves Planeta.
Neptuno, Saturno, Marte y Plutón se llaman las Naves en las cuales, una vez a bordo, los viajeros cuánticos encontrarán guía y apoyo durante el encuentro. Los comandantes de cada nave están esperando a sus pasajeros, listos para recibirlos y conducirlos a la Nave Nodriza. Ahí los capitanes aguardan que todo esté listo para el despegue, mientras el Staff Cuántico ajusta los últimos detalles para que el viaje al mundo de infinitas posibilidades sea una experiencia mágica e inolvidable, y sobre todo de autodescubrimiento y profundo aprendizaje.
Listos para despegar
Ya están todos ubicados en sus puestos en la Nave Nodriza. Comienza el viaje. Eneko y Gaby vuelcan ante los soñadores todos sus conocimientos para poco a poco ir introduciéndolos en los conceptos que rodean y comprenden la Realidad Cuántica. Comparten sus experiencias y las herramientas necesarias para lograr el acceso consciente al mundo del inconsciente. Transmiten todo lo que los soñadores necesitan para vivir la experiencia, descubrir el mundo onírico y transformar su vigilia; ayudándolos a ampliar la perspectiva para llenar de magia sus noches y sus días.
Descubrir el mundo onírico y transformar la vigilia.
Un viaje hacia el infinito
El fin de semana transcurrió entre clases teóricas, una charla con Robert Martínez y ejercicios energéticos; hasta tuvimos un concierto de música vibracional con Odin Kaban, pero sobre todo transcurrió en un estado de vibración de alta frecuencia. Cada soñador era un vórtice energético sosteniendo un vórtice mayor. Colaborando con la apertura de un portal hacia otra dimensión, hacia otro nivel de realidad. Se sentía el ambiente cargado de emociones elevadas. En esa burbuja no entraban las dudas de que algo mayor existe, de que somos más que un cuerpo físico y de que somos capaces de volar y darle forma a la realidad con nuestros pensamientos y nuestro foco de atención. Pudimos constatar que somos energía cargada de información vibrando al unísono con la inmensidad del universo y resonando con esta gran familia de soñadores que va creciendo día a día. Un grupo de almas que sostienen, ante todo, que otra realidad es posible y que abrazados podemos manifestar un mundo en armonía. Todos juntos y despiertos. Y soñando…
Cada soñador era un vórtice energético sosteniendo un vórtice mayor.
En este retiro aprendimos que somos poderosos y capaces de llevar a cabo lo que nos propongamos. Aprendimos que, si nos unimos, ese poder se multiplica y hace estallar el fuego de nuestros corazones, ancla sólidas raíces en la tierra y hace revolotear el aire creando torbellinos de luz, nutriendo y limpiando todo a su paso con un potente torrente de agua cristalina. Aprendimos que con un decreto lleno de pasión e intención somos magos moldeando la realidad. La importancia de nuestro cuerpo físico, ese vehículo que es esencial para vivir la experiencia en esta dimensión, quedó latente y pulsando después de un intenso ejercicio energético comandado por los capitanes de la Nave. Aprendimos la importancia del equilibrio energético y ahora sabemos que poseemos muchas herramientas para lograrlo. Todo es atención, práctica y constancia.
Aprendimos que somos magos moldeando la realidad.
Entendimos que nuestro espíritu puede bañarse en purpurina y brillar en la eternidad. Supimos la importancia de los espacios sagrados y como crear uno para sentirnos arropados y seguros, y sobretodo empoderados. El arte ritual nos acompañó durante todo el trayecto, alcanzando su máxima expresión durante la Noche de los Vigías del Sueño, donde todo se vistió de blanco y dorado. Las mishas andinas brillaban ante los soñadores desplegando todo su poder, haciendo de puentes entre la vigilia y el sueño.
En laNoche de los Vigías del Sueño todo se vistió de blanco y dorado.
Para la gran mayoría de los que estuvimos ahí, este fin de semana se abrió un portal que no se volverá a cerrar, para la gran mayoría se encendió una llama que no se volverá a extinguir, una luz que estará pulsando como un faro en el horizonte para guiar nuestro camino hacia los confines del cosmos y sus infinitas posibilidades. Se abrió ese portal hacia la Realidad Cuántica y hacia su universo multicolor. Una Realidad Cuántica abundante en riquezas para cosechar nuevos frutos y seguir sembrando semillas que nos ayudarán a crecer, a evolucionar y transitar esta experiencia de vida con nuestro máximo potencial. Aprendimos que tenemos infinidad de herramientas para cultivar nuestra mejor versión, para ser impecables. Es un tambor que no parará de latir.
Una luz que estará pulsando como un faro en el horizonte para guiar nuestro camino hacia los confines del cosmos y sus infinitas posibilidades.
La enseñanza del poder de la mente y el poder de relajar el cuerpo para internarnos en otras dimensiones de consciencia nos acompañará por el resto de nuestros días como almas y como cuerpos, como seres de luz. Ahora sabemos que somos capaces de danzar con las estrellas en un remolino de colores cósmicos, sabemos que podemos sumergirnos en las profundidades de nuestro Ser y explorar todos sus rincones. Aprendimos que la salida es hacia adentro.
Hemos traído a un plano consciente que somos átomos bailando en el vacío y que no estamos solos. Comprendimos que ese vacío lo es todo y está lleno de información anhelando ser descubierta para ayudarnos a expandir nuestra consciencia, y servir a favor de nuestro crecimiento.
Aprendimos que la salida es hacia adentro.
Lo más importante que me llevo de este Retiro de Sueños es, constatar que es posible abrir un portal hacia otra dimensión, sostenerlo y mantenerlo abierto con ayuda de una comunidad, de un grupo de almas vibrando al unísono en una frecuencia de Amor, Abundancia y Alegría. Que no pare la fiesta, que no paren los corazones, siempre hacia arriba y hacia adelante. Somos creadores de realidad.
Gracias a todos por hacerlo posible.